Un excongresista por Miami que firmó un contrato de 50 millones de dólares para hacer trabajo de consultoría para el gobierno de Nicolás Maduro al parecer no realizó ningún trabajo pero sí cobró una buena parte del dinero y lo dirigió hacia una compañía de yates a nombre de un multimillonario fugitivo, según nuevas acusaciones cotejadas en una demanda civil a las que tuvo acceso la agencia AP.